A lo largo de los años hemos podido comprobar que la calidad en la educación en los primeros años de vida tiene un impacto enorme en el desempeño posterior de los chicos.

 

La experiencia Von Glumer conduce a nuestros pequeños a obtener logros, a desarrollar una autoestima sana y a descubrir su potencial como seres humanos; todo en un ambiente cálido y lleno de experiencias de crecimiento.

 

A través del juego estructurado, en un ambiente rico en posibilidades de aprendizaje vivencial, nuestros pequeños desarrollan competencias para la vida, inician el desarrollo del pensamiento lógico-matemático y comienzan a pulir aptitudes de convivencia con sus pares, al mismo tiempo que adquieren un segundo idioma: el inglés.

 

Consideramos a cada uno de nuestros pequeños en forma individual y bajo ese criterio abordamos la particularidad de sus formas de aprender, orientándolos a descubrir sus talentos y a desarrollar sus áreas de oportunidad para expresar su potencial.

 

Nuestros grupos son reducidos y el número de profesoras y asistentes asignadas al área, permiten un trato cálido y personalizado que respeta los intereses y los ritmos de maduración de cada uno.